05 marzo, 2009

EL BUSCH GARDENS DE ORLANDO II



Serengeti Plain: bueno, amigos, esto es IMPORTANTE. Hablamos de una réplica muy vasta del Serengeti. Un terreno gigantesco, poco frondoso por fidelidad, y emocionante, donde encontrarás prácticamente DE TODO en cuanto a su fauna. Leones, jirafas, cebras y un inacabable etcétera. Pero es que, vamos con lo mejor..., y es que se puede recorrer A PIE (viendo todo desde jaulas de cristal, por debajo, de frente, explicándote fauna y flora, etcétera), en tren (cada mundo tiene su estación), por AIRE (Skyride) en teleférico de los que no paran y montas al vuelo, con un bamboleo de vértigo emocionante (y donde vas solo con tu pareja) y POR AUTOBÚS HECHO UNOS ZORROS (es Arte, obviamente), turístico, guiado y con trampa. Sí, con trampa, porque pasa por un puente que SE ROMPE y el autobús entero SE CAE AL AGUA. Pero hay trampa, ya digo, porque dicho autobús tiene flotadores verticales laterales y acabas la excursión POR AGUA. Sí, señores, nada físico falta para ver el Serengeti Plain. Tenéis un montón de fotos al respecto.




Luego hay otra opción no menos estimulante pero remunerada, que es ésa que te deja recorrer la atracción en un vagón gigante y sin techo de un camión típico de la zona, a lo carguero. La novedad no es sólo ésta, hay otra: PODRÁS TOCAR A TODOS LOS ANIMALES. Imaginaros los besucones con las jirafas, claro...



El parque es un mogollón de mundos africanos, pero priman más las atracciones, los jardines y los animales que el merchandising, los shows y las tematizaciones. Por eso, porque no te distraes, sales con la sensación de que te han dado una auténtica paliza. Algún show hay, sí..., o algunos monigotes esporádicos a lo desfile. Y no está poco conseguido, pero no tiene nada que hacer frente a los otros porque no es SU POLÍTICA, no porque no se pueda.

Vamos a seguir:



Mundo Morocco:

Katonga: éste es el único show a destacar, en un gigantesco templo marroquí. Durante 40 minutos, musicales y coreografía a servicio harán las delicias de cualquiera, pero con un toque lúdico-festivo más que chorra-infantil, que se agradece. Es algo así como el show del mar en Seaworld, pero más enfocado al corazón de la jungla. Estructurado en cuentos con escenografía, bailes y música. Recomendable.

El resto de espectáculos son prescindibles o directamente infantiles: Hospitality House Entertainment, American Beat, Rock a doo wop, Critter Castaways, Men of note o Friends forever. Generalmente tratan sobre ver animales en acción, escenarios replicando canciones de otras épocas o, directamente, monigotes en su salsa. ¿Se pueden ver? Sí, no indignifican, pero preferentemente para descansar, no para perder tiempo ni para ponértelo como prioritario.



Por otro lado, también te dan con el mapa (y casi cuentan como espectáculo) las horas concretas (hay varios pases en casi todos) para la posibilidad de ver a los cuidadores de todos los animales en activo. Os explicarán sus características, en ocasiones con mucho humor, y tendréis la ocasión de gozar la mezcla humano-animal de las ramificaciones del parque. Recomendable al menos en 5 de las 11 posibilidades que hay.



Andando, tendréis cientos de animales a tiro de piedra y puertas que replican lugares de manera muy conseguida, como la puerta de Nairobi. Seguimos con Morocco, pues:

Myombe Reserve: DESCOMUNAL entorno lleno de cuevas, puentes y cavernas para atravesar a pie. Su interior: peceras y acuarios gigantes, gorilas, monos y demás familia. Se puede observar hasta una espectacular catarata.



Jambo Junction y entorno: lo más llamativo de estas familias es, sin duda, los gigantescos galápagos. Cuando hablo de algo gigantesco, hablo de bichos como uno de nosotros de grande (más anchos y redondeados, obviamente).

Gwazi Sliders: atraccion infantil, que se sitúa al lado del monstruo que voy a narrar ahora, para compensar. Son los típicas sombrillitas volterejetas, muy propias para niños o CAGADOS, pero esperad, esperad...:















GWAZI: Hecatombe de madera, que es probablemente una absoluta locura terrenal. Vagonetas a lo MINA que suenan por todos lados y van a una velocidad de vértigo, con una vibración de los coches que hace hasta daño. Hay dos carritos, con dos recorridos bastante parecidos, pero ambos hasta arriba de cuestas, curvas y gritos. Mi mujer chilló fuerte y tuve que abofetearla para que volviera en sí. Muy larga, dolorida y decididamente recomendable para espabilar tanto Mickey Mouse y tanta polla. Fue la primera y la última que "disfrutó" la madre de mi futuro chavalote.

2 comentarios:

Pedro dijo...

cuántos años pasaste en EEUU?
Vives allí?

El zoom erótico dijo...

Yo es que ya me conoces: o hago las cosas bien o no las hago. Por eso no pararé hasta tener la mayor review de Orlando en la red.

Pero tranqui, tranqui, que ya sólo queda un artículo de este parque y luego los platos fuertes: Universal.