27 diciembre, 2012

Refugio 115


Como siempre, intentaré no hacer muchos spoilers del cortometraje, pero en este caso es evidente, dada su naturaleza, que voy a tener que explicar cosas de su argumento.

Uno de los problemas que parece atacar al cine de género en su globalidad es la incapacidad de salirse de cierta ansia de exhibicionismo y una obsesión por mostrar más de la cuenta. En general también me parece algo que viene empujado por el avance técnico y la inversión en efectos especiales y que hace que la posibilidad de crear un impacto visual realista acabe derivando en la necesidad de mostrar un impacto visual realista, algo que, en el fondo, es muy difícil de conseguir.

Por otro lado parece existir la idea de que insinuar siempre es mejor que mostrar, cuando probablemente insinuar bien, es mucho más complejo de lo que parece y se usa en muchas ocasiones para ocultar la incapacidad de contar algo o incluso cierta pereza al hacerlo.

Una de las ventajas de insinuar bien es que se juega con una ventaja importante sobre la psique del espectador que intentará rellenar el hueco con sus propios temores, porque en el fondo el horror a lo desconocido es lo que genera el miedo más aterrador posible.


Esa capacidad de insinuar sin caer en la trampa de parecer perezoso es lo que más me ha impresionado de Refugio 115, de Iván Villamel.

El corto nos sitúa dentro de un refugio antiaéreo durante los bombardeos de la aviación italiana en 1938. Un lugar donde pesa una extraña maldición y donde, a pesar de todo, se encuentra un grupo de personas para escapar de los bombardeos.

La lucha principal que acomete el corto es la de los protagonistas contra la oscuridad. Una oscuridad que funciona más como ente tangible y que les caza uno a uno. Aunque pueda parecer una elección fácil, la oscuridad como elemento es algo que funciona a nivel subconsciente, pocos somos los que nunca hemos tenido miedo a la oscuridad de niños, pero incluso de mayores ejerce una influencia importante al dejarnos solos con nosotros mismos y tener que enfrentarnos a esos momentos de autoconsciencia. Dada la localización temporal del corto, ese avance de la oscuridad tiene una interpretación geopolítica muy evidente con los sucesos posteriores, aunque el enfrentamiento casi personal de los protagonistas ante ella me parece una imagen mucho más poderosa sobre los efectos de la guerra en las personas.


En la parte técnica me he encontrado con un corto muy sobrio. La localización subterránea y el ambiente minimalista hacen que los efectos de cámara no necesiten demasiada pirotecnia, pero aún así visualmente funciona todo muy bien con cámara casi fija y algún que otro seguimiento cercano de la acción. Uno de los planos que más me ha gustado sucede casi al principio, justo después de la primera desaparición, en un momento donde los dos protagonistas principales se levantan de golpe y la cámara sigue el movimiento perfectamente sincronizada. Es uno de esos pequeños detalles que personalmente suelen llamarme mucho la atención. El juego de luces y sombras es imprescindible dado el contexto y crea un tono lúgubre que da mucho ambiente al corto.


Una de las cosas negativas, aunque tampoco es novedad en mi caso, son las interpretaciones. No es desconocido que suelo ser bastante crítico con la manera teatral de actuar de los actores patrios que en muchas ocasiones me acaban sacando de la narración. Este caso, por desgracia, no va a ser diferente, aunque siendo algo que casi siempre me choca, acabo ignorándolo bastante. También es cierto que las circunstancias de rodaje de un cortometraje son muy diferentes y no siempre se puede tener todo.

Por acabar de forma positiva, me chifla la música. El tema principal de Àlex Solana con ese aire infantil aunque con cierto toque enfermizo me parece perfecto. Me parece un enorme acierto el uso puntual que se hace del mismo, no solo con su uso durante los créditos de inicio, también por la aparición en dos momentos puntuales al principio del cortometraje y su posterior silencio durante el resto de narración para dar paso a algo mucho más tétrico que dura hasta los créditos finales.

Como siempre, este blog y yo personalmente, nos hemos posicionado a favor del cortometraje, no solo como medio de crecimiento para cineastas, sino como medio independiente y realmente poderoso para contar historias. Son cortos como este los que creo que nos dan la razón, y 100 nominaciones lo avalan.

Larga vida al corto.

Pedro Pérez (aka Findor)

Como bonus track, hemos conseguido también una mini entrevista a Iván, que ponemos a continuación (nota: La crítica anterior ha sido escrita sin leer la entrevista anteriormente):

1-.Tenemos entendido que eres uno de los únicos cortometrajistas que ha dado una lección al mundo de la distribución. No has pagado distribuidora y consigues ser un top 5 de los más nominados este año. ¿Cómo se explica y qué puedes contarnos al respecto?

Se explica desde la pasión y la dedicación, dos aspectos que siempre me han acompañado desde niño cuando se trata de cine, y la única forma que conozco de acercarme a este arte. La autodistribución requiere de mucho amor por lo que haces y de constancia, confiar en tu trabajo y tratarlo como a un hijo, algo que en muchas ocasiones olvidamos. Tu obra siempre debe ser lo primero, dar a conocer tu trabajo, eso es algo que también he visto equivocar en muchas ocasiones, cuando el cortometrajista está más pendiente de aparecer en la foto vendiéndose a si mismo que dejar crecer su trabajo y ganarse el respeto por ello.

Con respecto a las distribuidoras, no sólo no tengo nada en contra de ellas, sino que admiro la excelente labor de distribución que hacen con sus trabajos, pero en muchas ocasiones los cortometrajistas disponemos de pocos medios para esa colaboración. No siento que haya dado una lección a nadie, la verdad, aunque se agradece el halago, porque el trabajo es muy duro. Ese duro trabajo de autodistribución tiene su mayor recompensa cuando consigues un trato más cercano y personal con los festivales de cortometrajes y las personas que los llevan, algo que te hace sentirte aún más integrado en esto.


2-.Han definido tu cortometraje como un "Alien, el Octavo Pasajero" en la Guerra Civil. ¿Por qué la Guerra Civil? ¿Dinamitar el género de esta brillante manera te hace huir de los tópicos al respecto? ¿Cómo conseguísteis esa localización y de qué manera transcurrió el rodaje?

La verdad es que nunca tuve presente “Alien” cuando desarrollé la historia, pero me encanta la definición por lo de mezcla genérica que tiene y por la debilidad que siento como espectador hacia esta película. Y precisamente era lo que buscaba a toda costa, evitar los tópicos sobre la Guerra Civil, construir una historia que hablara de lo que nunca nos hablan sobre ese periodo. Después de muchos años de obsesiva dedicación cinéfila, no conseguía recordar películas que hablaran de esas personas anónimas de las que nunca hablan este tipo de películas, los que se refugiaban bajo tierra con el único objetivo de esperar que pasara el horror para volver a sus casas. Me pareció que podía ser un tema muy interesante, explorar esa convivencia, y al igual que los tópicos generales sobre este tipo de películas, dinamitar también el concepto estatus social, ya que ahí dentro toda persona estaba expuesta al mismo riesgo, sin privilegios de género, condición o posición social. Construí la historia bajo esa premisa y sobre dos conceptos más, el enfrentamiento ancestral entre luz/oscuridad y la relación metafórica guerra/oscuridad. La localización fue casual, una simple búsqueda en Internet me llevó a una página web de un refugio antiaéreo en el pueblo de La Garriga, situado a unos 40 km de Barcelona. Me quedé asombrado de cómo estaba conservado y me obsesioné con rodar allí por las excelentes condiciones que ofrecía para desarrollar el estilo visual y cinematográfico que buscábamos, algo que los refugios antiaéreos de Barcelona no nos daban por diferentes motivos. El Ayuntamiento de La Garriga se portó de maravilla con nosotros, porque nos lo cedió siendo un espacio cerrado al público, solo visitable una vez al mes con visita guiada.

Cuando te encuentras con una localización así todo ayuda, y compensa ciertas dificultades que tuvimos en rodaje, como por ejemplo el limitado espacio para mover un gran equipo de gente ahí dentro, el frío polar que hacía en el mes de Enero o la altísima humedad del interior del refugio. Por suerte, tuve el privilegio de contar con un equipo muy cualificado, lo mejor de lo mejor en su puesto dentro de nuestra escuela de cine “Bande à Part”, en Barcelona. Ver la trayectoria que lleva “Refugio 115” este último año habiendo sido producido en una escuela de cine, con todas las limitaciones que eso conlleva, es una sensación muy satisfactoria.

3-.¿Qué futuros proyectos tienes y qué puedes decir del actual estado del cortometraje español, en cuanto a títulos, recorrido y festivales?

Estoy con varios frentes abiertos, y todos ellos me ilusionan mucho. El más inmediato es mi próximo cortometraje, del cual estoy revisando versión final de guión para rodarlo con toda seguridad este próximo año 2013. De nuevo me adentraré en el terreno del fantástico para intentar utilizar el género para contar algo más de lo que se ve en principio, la elección que más me motiva como creador y como espectador, cuidar la forma para llenar lo máximo posible el fondo. Además, como todos los que nos queremos dedicar a esto, llevo tiempo trabajando en el tratamiento de un largometraje de cara a medio/largo plazo, sobre el conflicto entre la civilización y la naturaleza, con mitos del folklore local de por medio. El otro gran proyecto que ocupa mi mente y me ilusiona mucho es “Cortópolis”, un gran evento de cortometrajes que se celebrará cada mes a partir del 2013, en el cual el espectador podrá disfrutar de lo mejor del cine corto a nivel nacional e internacional. Formar parte del equipo de selección de trabajos y compartirlo con esa gran familia que es “Cortópolis” será un placer muy grande. Se trata de otro gran proyecto de esa mente rebosante de ideas y de talento que es Raúl Cerezo, compañero y amigo, apoyo y ejemplo, un placer siempre. Creo con firmeza que el estado del cortometraje español es excelente, pese a las limitaciones que parece que sufrimos cada vez con mayor fuerza en este país. Precisamente una de las grandes ventajas de la autodistribución que comentaba antes y de tratar en cercanía a profesionales dedicados a esto en el extranjero, es poder comprobar el enorme aprecio que hay al cortometraje español alrededor del mundo, tanto a nivel generalista como a nivel de cine fantástico, que es lo que a mi me toca más de cerca. A veces me da la sensación que se valora mucho más fuera de nuestras fronteras que dentro, cuando el nivel de talentos es muy alto y cada año surgen nuevas obras que ocupan un lugar de privilegio en los festivales más prestigiosos del mundo.

Si hablamos en concreto de cine fantástico, que es el espacio que ocupa “Refugio 115”, lo veo con muchísima salud porque cada vez hay más festivales y espectadores, pero sufriendo el problema que ha sufrido siempre el género, ser ninguneado con respecto al cine generalista en más ocasiones de las que nos gustaría, un mal endémico sufrido a lo largo de toda la historia del cine y al que aún buscamos una solución definitiva.

18 diciembre, 2012

Carpinteros y otros artesanos


Siempre he considerado básico para el análisis de ciertas obras un mínimo de dos o tres pasadas, preferentemente separadas por un tiempo prudencial. Dentro de este comportamiento, suelo considerar interesante la revisión de obras completas, algunas de ellas con la perspectiva del conocimiento añadido durante los años. Suelo hacerlo con Kubrick especialmente para descubrir como siendo alguien que me ha gustado casi desde siempre, he cambiado la manera de enfocar sus obras, de manera que ahora mismo las admiro por cosas radicalmente diferentes a las que admiraba hace años.

Dentro de este modelo de revisión y aprovechando algunas reediciones en Bluray, he decidido ponerme con John Carpenter, y curiosamente el otro día (quien dice día, dice mes, que he tenido poco tiempo para escribir) le tocó a They Live!. A pesar de su tosqueza visual a momentos, algunas de las cosas que vi me hicieron tener ciertas inquietudes por el Carpenter comunicador más que por el Carpenter cineasta. They Live! empieza en un mundo aparentemente de crisis donde una grupo de alienígenas disfrazados controlan económica y socialmente el país, todo dentro de ese tono Carpenter, pero de repente, y es algo que apenas recordaba, me encuentro el siguiente discurso:

...our impulses are being redirected. We are living in an artificially induced state of consciousness that resembles sleep... ...the movement was begun eight months ago by a small group of scientists who discovered, quite by accident, these signals being sent through television... ...the poor and the underclass are growing. Racial justice and human rights are nonexistent. They have created a repressive society and we are their unwitting accomplices... ...their intention to rule rests with the annihilation of consciousness. We have been lulled into a trance. They have made us indifferent, to ourselves, to others, we are focused only on our own gain. We ha... ...please understand, they are safe as long as they are not discovered. That is their primary method of survival. Keep us asleep, keep us selfish, keep us sedated... ...they are dismantling the sleeping middle class. More and more people are becoming poor. We are their cattle. We are being bred for slavery.

Indiferencia, rebaño, pobreza extrema, destrucción de la clase media, represión... Es difícil ver el mundo en que vivimos actualmente sin asociarlo con alguno de estos términos. A pesar de que todo esto parece que sea algo de la reciente crisis, hablamos de una película que tiene casi 25 años, ¿es posible que me acercase a Carpenter por sus temáticas y de repente me haya perdido algo importante?

Leed el Zoom Erótico!
A Carpenter se le llama el maestro del terror, considerado autor de culto (eso que a veces parece sinónimo de "cine cutre pero que mola"), pero es su faceta como narrador la que me estoy redescubriendo y la que me llama más la atención. Considerando su carrera así a grosso modo, Carpenter encaja dentro de los cánones marcados por la literatura clásica de ciencia ficción. Quizá no consiga la excelencia técnica de los grandes, pero su faceta de comunicador funciona de forma casi perfecta.

Una de las cosas que siempre me llamaron la atención de la literatura de ciencia ficción es la manera de presentar crítica social en escenarios imaginarios. Es evidente que esta característica no es exclusiva, pero curiosamente muchos de mis libros favoritos son de este género. Desde cómo se afronta la pobreza y la separación extrema de clases en Gateway (Frederik Pohl), las sociedades represivas de 1984 o Fahrenheit 451, pasando por Asimov, Clarke, Heinlein y un largo etcétera de autores que usan la ciencia ficción como espejo y que se atreven, no solo a afrontar los problemas del presente, sino sus consecuencias futuras.

Carpenter presenta una distopia parecida en They Live!, una sociedad extrema con pobres muy pobres y una clase alta, alienígena en este caso, que usa mensajes ocultos para controlar a la sociedad. Es la metáfora de las gafas que hacen ver la realidad la que me parece maravillosa a pesar de su evidencia, es el esfuerzo de ponerse las gafas y querer ver lo que despierta a la gente, pero incluso así, es algo que no todo el mundo hace, de hecho nadie parece querer hacerlo. Quizá por ser Carpenter (maestro del terror) o ser ciencia ficción (que quiera o no parece considerarse un género menor), no es una película de las que aparezca en las listas de crítica social, y sin embargo funciona perfectamente como símil de lo que estamos viviendo en los últimos años. No es la única aproximación de Carpenter a futuros distópicos, ya es algo que aparecía en su primera película, Dark Star (1975) y que llevó a un extremo todavía más evidente en Escape from New York (1981) donde el grado de nihilismo y desolación, a pesar de parecer una película de aventurillas en un futuro cercano, es enorme.

La representación del ser humano en situaciones extremas es algo que lleva haciendo Carpenter desde sus inicios y es algo que realmente me fascina de su forma de narrar, desde el grupo de héroes imposibles superando todas las posibilidades de Assault on Precinct 13 (1976) hasta la deconstrucción perfecta del héroe de Big Trouble in Little China (1986), una de sus mejores películas por su forma de combinar elementos de múltiples géneros y de hacer un análisis de la imagen del héroe americano y su mitología creando la antítesis perfecta del concepto que se manejaba en el cine de la época.

Soy un patán pero molo
Aunque parezca la elección evidente, The Thing (1982) sigue siendo mi película favorita de Carpenter, que no veo tanto como un remake de la producción de Howard Hawks The Thing From Another World (1951), como una readaptación de la historia original “Who goes there?” de John W. Campbell, Jr. No solo representa un hito técnico en efectos y creación de monstruos por parte de Rob Bottin, la situación de paranoia y desconfianza está representada de forma excelente y crea un ambiente de desasosiego y desconfianza que su precuela/secuela moderna no puede ni soñar en alcanzar, por mucho avance tecnológico que disponga. Carpenter considera esta película como la primera de lo que llama "La trilogía del apocalipsis", completada por Prince of Darkness (1987), con una atrevida aproximación a temas peliagudos como la fe y la religión y finalizada por In the Mouth of Madness (1995).

In the mouth of Madness es una película que forma parte del mi top particular de Carpenter por varios motivos, su aproximación al horror cósmico al estilo Lovecraftiano (también presente en Prince of Darkness) pero sobre todo por el uso maravilloso de la narrativa no lineal y la distorsión del tiempo y el espacio. Dentro de la esquizofrenia y confusión de realidad y ficción aparece también la autoconsciencia del film por la narrativa del cine de terror y sus paradojas, idea reaprovechada por Craven y su Scream poco después y por la reciente Cabin in the Woods.

Pasando el sábado por la tarde de tranquis
Dentro de casi todas las disciplinas artísticas existen los pioneros, los artistas, y existen los artesanos, que en general aprovechan lo creado por otros para generar su visión. No tengo nada en contra de los artesanos (de hecho yo soy un poco así porque dudo que mis reflexiones sean para nada novedosas) ya que de hecho las cimas suelen ser alcanzadas por ellos, suelen ser los que evolucionan la técnica hasta la excelencia, pero muchas veces a costa de tapar a los verdaderos pioneros. Carpenter es un pionero, un tipo arriesgado y no siempre con el beneplácito de la crítica y el público, pero en el fondo es uno de los elegidos que, con su particular visión, han creado en parte lo que ahora mismo es el arte del cine.

Pedro Pérez (aka. Findor)

06 diciembre, 2012

Crónicas carcelarias: Muestra de cortos en Almería

Viernes, 23 de noviembre de 2012.

Es la segunda vez que entro en prisión.
 

La primera ocurrió hace unos meses. Entonces llevé bajo el brazo mi novela negra y ultraviolenta “El país de los ciegos”. Los psicólogos y educadores se echaron las manos a la cabeza. Esta vez traigo cine, corto, pero contundente.

Centro Penitenciario “El Acebuche”, Almería. Pasamos el primer acceso de control. Mi DNI desaparece y se transforma en un cartón que pone “visitante”. No sé dónde colgármelo. Llegamos al perímetro. Me siguen sorprendiendo las alambradas enroscadas, todo ese espacio vacío y perdido, el limbo entre la libertad y el encierro. El segundo acceso es más restrictivo todavía. Las puertas chasquean y se deslizan ruidosamente sobre una jamba metálica. Los barrotes son gruesos, y la pintura beis que los recubre nos los hace más simpáticos. Hasta que no se cierra un portón no se abre el siguiente. Más chasquidos. Más barrotes.

Los módulos se despliegan ante mí. Caminamos por los pasillos. Hay gente por ellos. Están tranquilos, saben lo que hacen, hacia dónde van. Yo me limito a seguir a mi guía. Ascendemos por unas escaleras que huelen a recién pintado. Llegamos a la sala de proyecciones. Es amplia, pero se quedará pequeña para todos los internos. Me cuentan que solo asistirán tres módulos. No pasa nada. Repetiremos otro día para los demás.

Las butacas se llenan. El público bulle. Hablan, se saludan, se reencuentran, se evitan. Comprobamos el sonido. Apagan las luces. Es la hora.
Me presentan. Me pasan el micro. Siento sus pupilas sobre mí. Estoy en lo alto de una tarima. A mi espalda está la pantalla. Cuento de qué va la actividad y explico el primer corto. Lo escribí y dirigí hace unos años. Se titula “Canela vol. 0,5”. Es la precuela de uno de Pablo Ferrando. Desaparezco tras la cortina y dejo que el cine haga su magia.

La gente responde. Se ríen, se asustan. Esto funciona. Cuando termina, regreso a la tarima. Es entonces cuando aplauden. Me siento halagado. Vale, tíos. Dejad que siga. El siguiente es más largo. “Niños que nunca existieron”, de David Valero. Ganador de multitud de premios. Un director con un futuro brillante. Su corto lo demuestra. Les entusiasma. Sufren al lado de los protagonistas. Los títulos de crédito les noquean. Más palmas.
Sigamos. “8”, de Raúl Cerezo. Cine de terror diferente. Arriesgado, homenaje a los inicios del género, mudo, una banda sonora brutal, planos milimétricos, una puesta en escena perfecta. Más de 150 nominaciones y decenas de galardones. Le prestan atención enfermiza. Esperan que pase algo, que el desenlace les deje sin aliento. Y sucede. Los títulos comienzan a salir y ellos aún están digiriendo lo que han visto. Aplauden como locos.

Nos quedamos sin tiempo. Quería poner “Emala3bien: los malditos”, de Miguel Ángel Font, pero dura 40 minutos. Por suerte también tengo “Eienesis: In Search of Light. Un corto metafórico que habla de la sensibilidad de la creación quizá parezca más arriesgado. Da igual: la anterior vez conocí a un pintor ruso muy bueno que descubrió su vocación cuando estaba interno. Lo proyectamos, contemplan la belleza de sus fotogramas, aplauden. Aplauden mucho. La capacidad de apreciar la belleza no se pierde tras las rejas.

Aún tengo tiempo para una pieza más. Una muy especial. Algo que nadie antes había visto, ni dentro ni fuera. Algo que me han regalado en exclusiva para esta muestra. Se trata de un anticipo de lo que será la película “Criando ratas”, una cinta que recupera el cine quinqui, pero que lo actualiza y le da un lavado de cara. Con el micro en la mano explico lo que van a ver. Actores no profesionales que pasaron por prisión, gente de barrio que conoce las drogas de cerca, una película que ha hecho más por su reinserción que mil programas estatales. Un proyecto único, imposible, social, maravilloso, genial. Play. Ahí está el Cristo haciendo de las suyas, mira al Mauri robando risotadas con sus monólogos geniales, fíjate en las calles de lo más oscuro de Alicante. Cine-realidad. Cine-total.

Aplauden. Les encanta. Me preguntan cómo participar en cortos. El que lo dice es músico, pero quiere salir de actor. Le digo que también se necesitan músicos en los cortos. Da igual: él quiere ser el nuevo Cristo, el nuevo Mauri. Aplauden otra vez. Me obsequian con una placa de barro que hacen ellos mismos en los talleres.

Me dan las gracias, pero soy yo el que está agradecido.

Claudio Cerdán, 28 de noviembre de 2012.

12 julio, 2012

Summer, summer tiiiime...

Edito: pongo directo el vídeo, vedlo antes de leer, por dios...


Desde los inicios de mi participación en este blog he sido un enorme defensor de lo formal y de intentar evaluar la calidad por encima de mensajes, interpretaciones, nostalgia o cosas similares. Uno quizá pueda pensar que debido a esta manera de aproximarse al cine, se pierde la capacidad de sorprenderse o divertirse, pero no todo es tan blanco o negro, incluso desde la postura de pontificador que hace uno en un blog...

También me he declarado fan de Jackie Chan y sucedáneos del cine de hostias pero nunca se me ocurriría mezclarlo con Kubrick...

No sé hasta que punto empezar hablando en estos términos de cine cutre puede parecer un buen prologo para presentar una crítica de un corto, parecía mejor idea en mi cabeza cuando lo empezaba pero al final hay algo positivo detrás de esto... espero...

Una de las mayores virtudes de la propuesta de Brutal Relax es la naturalidad de su exceso. Por algún motivo que todavía no domino del todo, hay propuestas que me parecen naturales y otras que no, aquí parece entrar la subjetividad esa contra la que uno puede intentar luchar pero que en realidad forma parte intrínseca de la vida. Existen propuestas como esta que consiguen pasar cierta barrera emocional y otras que no, como por ejemplo, Machete. La diferencia que a mi me salta entre Machete y Brutal Relax es que la primera intenta ser natural y divertida y la otra simplemente lo es. Esa sensación, aún entrando en el terreno de lo estrictamente objetivo, es la que me transmite este corto, de manera que cuando salta el momento de despiporre, simplemente, te dejas llevar.

Pos aquí estamos, en la playiqui.
La idea base de Brutal Relax es especialmente simple, por no decir inexistente, el señor Olivares, con apariencia ligeramente psicópata, se va de vacaciones a relajarse a una playa paradisiaca... Todo es felicidad mientras el señor Olivares lleva su walkman y se reboza en barro, aunque todo el mundo se ría de él... Ese momento me gusta especialmente por abrir la posibilidad de que el protagonista se ponga a rematar gente sin más, pero no, de repente aparecen del agua los infectados/demonios/quemásda que son los que se ponen a despedazar a la gente...

Gente de Ibiza, amantes de la fiesta.
Y todo es muerte y gore hasta que se acaban las pilas del walkman de nuestro psicópata protagonista... Un detalle tan demencialmente absurdo merece un aplauso así en alto, no hay heroicidades, no hay nada más que un tipo que se vuelve loco porque se queda sin walkman... Y esto desemboca en el segundo festival de gore...

Me parece especialmente genial el momento niño por lo excesivo y salvaje de la propuesta incluso dentro de una narrativa excesiva y salvaje, y más siendo un fan enorme de lo que viene siendo el humor negro.

Sinceramente creo que si entro a niveles formales, Brutal Relax tiene poco que hacer comparado con algunos de los otros cortos analizados para el Zoom, pero también es importante destacar que no creo que exista una necesidad narrativa de funcionar a esos niveles formales. El modelo visual y estético de Brutal Relax, con su toque cámara en mano y su estilo grindhouse resulta extremadamente adecuado para lo que está contando a pesar de que quizá no alcance (quizá también porque no la busca) la "excelencia" formal que sí alcanzan otros cortos.

Lo que destaca por encima de lo demás es toda la parte de maquillaje y efectos, que están a un nivel absolutamente espléndido. Y que aún teniendo algún que otro cante CGI, me han sorprendido muy gratamente por como están integrados y lo bien que funcionan, teniendo en cuenta todo eso de que es un corto y hay presupuesto reducido... Realmente creo que está por encima muchas películas de mayor envergadura…

Yo es que me parto...
En definitiva, Brutal Relax es una propuesta divertida y sin complejos por parte de Adrián Cardona, Rafa Dengrá y David Muñoz que apuesta claramente por lo grotesco, el exceso y el humor negro y que funciona precisamente por todo esto y sin necesidad de darle demasiadas vueltas a lo demás…

La Troma estaría orgullosa de ustedes...

Pedro Pérez (aka Findor)

25 junio, 2012

Arjona se nos pone serio


Y todo sin dejar de lado su sentido del humor. El popular cómico se nos va confirmando como cineasta y escritor de cine. Le presentamos para despistados poco atentos: Diego Arjona nació en Algeciras(Cádiz) en 1.978. Tras diplomarse en Magisterio, se traslada a Madrid donde cursa estudios de dirección cinematográfica y guión, compaginando esta actividad con su faceta cómica. Tras su paso por televisión en “El Club del Chiste” de Antena 3, inicia la gira de su show “Un monólogo divino” del que es autor y se une a “El Club de la Comedia” actuando por teatros de toda España. Ha sido colaborador en la Cadena Ser (Campo de Gibraltar) y en Punto Radio, en el programa “Queremos hablar”, de difusión nacional. Como realizador, es autor de varios cortometrajes, entre ellos “Chanquete ha muerto” (2005),”Acuérdate de mi” (2007), “Exitus” (2008) y “Abracadabra” (2012).


Pero en esta ocasión, le entrevistamos por la publicación de un nuevo libro suyo: Los brazos fuertes del cine de acción de los 80 y 90. Un innovador texto nunca tratado en España que nos habla sobre el cine de acción de esa época, que llegó para instaurarse fuerte en el colectivo. Arjona, fiel a sus principios, prepara un proyecto el cual algo tiene que ver con eso y es top secret: "Los prescindibles". Algún miembro de El zoom erótico ha tenido la ocasión de trabajar con él, codo con codo, en dicho proyecto. Pero eso es otra historia que será historia. Ya les contaremos.

Ahora, vamos a pasar a una entrevista exclusiva. A tres bandas, como va siendo habitual en el zoom y promete no dejar de serlo:

Raúl Cerezo: Señor Arjona, publica usted un libro exclusivo que repasa el cine de acción más elemental a través de un análisis de las carreras de Stallone, Schwarzenegger y Van Damme. También hay capítulos de Carlos Díaz Maroto (en su prólogo, habla de la génesis anterior), de Pedro José Tena (un exclusivo diccionario analítico donde se citan todos los héroes de acción existentes) y de varios artistas y autores populares que le cuentan cuál es la película de acción preferida (parece que Jungla de Cristal es la más votada),  entre alguna otra sorpresa. En El zoom erótico, somos algo culo duros y aún así pensamos que el libro es fantástico, porque en un tono desenfadado y directo al comprador más convencido del libro, usted da lo que le piden. ¿Por qué pensamos que el  libro es fantástico en un blog como éste? Por lo que ya hemos dicho y porque, aparte de disfrutar en el mismo de una maquetación  y encuadernación notable, creemos que Stallone y Schwarzenegger tienen algunos títulos que son valiosos a cualquier nivel, no sólo al del fan de este cine. Pero en cambio, Van Damme, pensamos que no tiene una sola película válida a un nivel externo de todo esto. De hecho, sus películas son parejas en calidad a las de Steven Seagal y todos éstos. Es decir, que no salen más allá. ¿No lo cree así aunque sea fan? ¿No piensa que son incomparables estos actores, viendo los resultados? ¿Qué cree que han aportado estos señores al Séptimo Arte, fuera de sus fans más directos?

Diego Arjona: Rotundamente no. De hecho, denota usted cierto desconocimiento sobre la carrera del belga de oro. ¿Ha visto todas sus películas?, me temo que no, si no destacaría momentos de buen cine, sobre todo extraídos de sus colaboraciones con el gran artesano Peter Hyams (Timecop o Muerte Súbita) u otras colaboraciones con directores orientales, desde John Woo a Ringo Lam, pasando por Tsui Hark.

Aunque una cosa si tengo que reconocerle, y es que tanto Stallone como Schwarzenegger siempre han estado un peldaño por encima de Jean Claude. Los dos titanes en los que se cimenta el cine de acción ochentero supieron jugar a la perfección sus bazas, uno su talento innato y el otro su inteligencia a la hora de elegir con quien rodearse.

Al séptimo arte han aportado bastantes cojones, un cine lleno de pulsión que a muchos, aunque les pese reconocer, les ha llegado a tocar la fibra sensible en más de una ocasión. Que Billy Wilder hacía mejores películas, por supuesto, pero que los héroes de acción han puesto en pie a la platea miles de veces, es un hecho tan refutado que a muchos hasta les dará miedo reconocer.

Alejandro Pérez: Las películas de acción siempre fueron consideradas exclusivamente para tíos, pero podemos recordar a Willis y Van Damme  levantando pasiones entre el público femenino, en sus buenos tiempos ¿a qué cree qué se debe?

DA: A que tienen un culito irresistible para hincarle el diente. No, en serio, creo que ambos se distancian bastante del prototipo “armario empotrado” con el que el cine de acción comenzó su exitosa carrera por las salas cinematográficas. Ambos tienen un punto más realista, si es que podemos aplicar este término. A las mujeres les suelen gustar los hombres “de verdad”, y tanto Van Damme como Bruce acercaron ese matiz a las audiencias.

Van Damme dirigido por Arjona... ¿Quién sabe?
Pedro Pérez: Tengo la sensación de que Van Damme ha sido capaz de reciclarse mejor al colaborar con grandes como Woo, Tsui Hark o Ringo Lam. ¿Son Stallone y Chuache un poco "tontos" por no intentarlo o simplemente su perfil no encaja con este estilo de cine?

DA: Creo que tanto Stallone como Arnold han sido los más listos de la clase. Llevar en el negocio entre 30 y 40 años no es nada fácil, y ellos lo han conseguido con aparente facilidad. Solo debes observar un detalle, cuando absolutamente nadie daba ya un duro por ello, cuando parecía que sus carreras estaban más hundidas que el Titanic, llegan y se sacan de la manga nuevas continuaciones de sus sagas más famosas o se reúnen todos juntos para un fiestorro de tiros, hostias y explosiones que hace que millones de personas en todo el mundo vuelvan a arrodillarse ante ellos. En serio, ¿crees que son tontos?
Respecto a Van Damme, pienso que ha tardado demasiado en aceptar su rol dentro de la industria, y esa tardanza casi le cuesta la carrera. Pero desde su magistral “JCVD” creo que algo ha cambiado en su cabeza y desde entonces no ha parado de buscar nuevos retos (el año próximo estrena su primera comedia, muy en la línea de la comedia actual americana), acepta papeles de malo-malísimo, ha rodado en Turquía, Francia, Rusia, Reino Unido…está claro que está buscando un cambio.

Raúl Cerezo: Stallone tiene dos sagas incuestionables en popularidad e incluso, en varias de sus entregas o momentos,  en calidad. Pero si nos ponemos un poco observadores, todo lo que ha hecho fuera de ahí (más allá de títulos curiosos o de culto como “Copland”, “Cobra”, “Evasión o victoria”, “La carrera de la muerte del año 2000”, “FIST” o “Halcones de la noche”) no ha ido, si hablamos de calidad cinematográfica, a ningún sitio respetable. De hecho, en muchos años de su carrera no le quisieron ni sus fans cuando salía de esos márgenes. O incluso en todos esos títulos del paréntesis, que no son desdeñables, ha hecho siempre un papel derivado de Rocky y Rambo. ¿Se puede decir entonces que es un actor pésimo y, sin embargo, tiene dos personajes que le han hecho vivir de las rentas y sorprendernos o vibrar a todos?

DA: Pienso que Stallone tiene algo muy  a su favor, y es su enorme carisma. Es cierto que hay muchos de sus films en los que los personajes que interpreta tienen un mucho de sus Rockys o Rambos, y eso es lo que el gran público ve, o mejor dicho, no ve pero si lo siente. Si sus legendarios personajes perduran en el tiempo, cuando ramalazos de estos aparecen en otros personajes del mismo actor, el público se percata de ello. En algunos casos la calidad de la película no era la mejor, como es el caso de “Yo, el halcón”, pero sin embargo se metió  a buena parte del público en el bolsillo con esta película en la que un padre bonachón busca reencontrarse con su hijo.

Respecto a la calidad interpretativa de Sly, pienso que se han cebado con el  de manera desorbitada. Estaremos de acuerdo en que no es un Paul Newman, pero peores actores dejan ver sus caretos por las pantallas como para colgarle al bueno de Sylvester el San Benito de peor actor. Claro que hay mejores actores que él, pero pienso que excepto en ciertas decisiones de su carrera, ha sabido jugar con lo que tiene y normalmente le ha salido bien.

También es muy difícil para mí ser realmente objetivo con esta cuestión, porque la mayoría de sus películas las vi siendo niño y el factor nostálgico a veces me nubla a la hora de hacer un juicio certero. Pero si ese cariño está ahí por algo será.

Alejandro Pérez: ¿Cree qué si Stallone se puliera mucho, salvando las distancias, podría tener una vejez en la silla del director con copa y puro tipo Eastwood cómo se intuía en los mejores tramos de Rocky Balboa? ¿Qué piensa de él como director?

DA: El público en general desconoce la faceta como realizador y guionista de Stallone. Mucha gente piensa que solo es un tipo con cara de bobo y la boca torcida que no sabe hacer otra cosa que sacar músculos, pero Sly es mucho más listo de lo que la gente piensa. La saga Rocky es lo que es gracias a él (con sus aciertos y errores) y creo que es innegable que las cuatro secuelas dirigidas por él tienen mucho cine dentro. Por favor, “Rocky III” y “Rocky Balboa” rozan por momentos la genialidad.
El último Rambo tiene una fuerza visceral y le da mil patadas al 99% del cine de acción actual. Eso sí, creo que en “Los Mercenarios” se le fue un poco la mano, se dejó influenciar demasiado por ese, para mí, pésimo estilo que marcó la saga Bourne, esos planos que no duran ni un segundo, con cuadros extra cerrados en los que no se ve un carajo lo que está pasando.

De cara al futuro, no lo sé, la verdad. Yo creo que puede sorprender a la audiencia con películas dirigidas por él, pero no tengo demasiado claro si, como Eastwood, se alejará del cine que le dio la fama. El tiempo dirá…

Pedro Pérez: ¿Hay algún director actual de acción a tener en cuenta? ¿Algo destacable en Europa o los USA? ¿O los fans del cine de guantazos tenemos que seguir mirando hacia Oriente como lugar de referencia? 

DA: Creo que hay bastante talento. En estos momentos se habla mucho de un film titulado “The Raid” que con un presupuesto irrisorio está dando mucho que hablar. También le tengo el ojo echado a John Hyams, hijo del veterano Peter Hyams, y que tras ver lo que hizo con la tercera entrega de “Soldado Universal”, en la que con un puñado de billetes y rodando algo más de 20 días en una fábrica abandonada, consiguió un film espectacular, mi direct to video favorito de 2010. También en el mercado videográfico, encontramos a Roel Reine, que ha dirigido dos secuelas de "La carrera de la muerte" y que, como hace el bueno de John Hyams, exprime al máximo los ridículos presupuestos con los que cuenta.

PEQUEÑA NOTA PERSONAL post-entrevista de Pedro Pérez: He visto "The Raid" y es de lo más grande que se ha hecho en el cine de hostias en mucho tiempo, véala señor Arjona y no se arrepentirá...


El gran olvidado
Raúl Cerezo: Stallone ha demostrado ser mucho mejor actor que Schwarzenegger. En sus papeles emblemáticos ha hecho composiciones incluso de Óscar pero, en cambio, el austríaco ha estado en algunas buenas películas pero lo peor de la función era él, que se limitaba a posar. ¿No lo cree así? ¿No piensa que las películas buenas de Schwarzenegger lo han sido siempre por saber rodearse y que él casi era lo único malo de la función? ¿No hubiera sido preferible un armario musculado y que encima fuera buen actor? ¿Va a hostiarme al final de esta entrevista? 

DA: Puede que el mayor problema de Arnold es que, y exceptuando “Terminator” y “Conan”, siempre es Arnold. Le pasa un poco como a Tom Hanks, que haga el papel que haga, siempre vemos al hombre por encima del personaje.

Unas líneas más arriba comentaba que Arnold ha sido y es el más listo de todos, que ha sabido rodearse de lo mejorcito del género, y es que no todos pueden presumir de haber rodado con James Cameron o John McTiernan. Pero sin embargo, no creo que eso haya ido en contra de la película, el público quería ver a Schwarzenegger repartir hostias y eso es lo que tuvieron. Le querían a él, muchas veces por encima del personaje al que interpretaba. Lo que hacía vender entradas era su careto y eso fue y es lo que se le da a su audiencia. Por mi perfecto.

En cuanto a hostiarle a usted al final de la entrevista, le diré que su físico ha perdido mucho morbo, cuando estaba más rellenito le tenía mas ganas.

Alejandro  Pérez: Tanto Sly como Arnold estuvieron muy ligados al círculo social de los presidentes republicanos. ¿Eran las películas de acción de aquella época un fiel reflejo del pensamiento político americano?

DA: La política es algo que jamás me ha llamado la atención, por lo que es un tema que siempre he procurado mantener al margen. Pero a pesar de mi desinterés al respecto, me suelo informar de cómo está el mundo y en la época dorada de Rambo, a mitad de los ´80, el por aquel entonces presidente Reagan supo aprovechar ese filón para vender la moto, algo a lo que el propio Stallone pareció no importarle. Pero sinceramente, jamás he valorado a un artista por sus inclinaciones políticas. A mí me gusta un actor, cantante, escritor… por su obra y no por su vida privada, de lo contrario, no podría ser seguidor de Schwarzenegger, que se ha pasado un montón de años metido de lleno en estos asuntos.

Pedro Pérez: 1999, The Matrix... ¿Evolución (un nuevo amanecer en el cine de acción) o lacra (referente mal copiado hasta la saciedad)?

DA: The Matrix me pareció un gran acierto en el momento de su estreno. Todo lo que derivó después de aquello es algo que de solo recordarlo me produce arcadas. Por Dios, las dos secuelas de Matrix son vomitivas, y el estilo que marcaron los Wachowski lo tuvimos que sufrir peli si peli también en todo lo que fuera cine de acción. Durante la “moda Matrix” era un verdadero coñazo ir al cine a ver pelis de acción, porque intentaban ser un calco de esta. Además, por aquella época, tanto Stallone como Schwarzenegger, Van Damme y compañía, estaban iniciando su declive artístico, por lo que tampoco nos podíamos agarrar a ellos para consolarnos. Y cuando parecía que aquello había pasado, llegó la saga Bourne, y nos volvieron a meter por las narices mil películas rodadas con el mismo estilo. ¿De verdad cuesta tanto rodar una escena de lucha con lentes angulares?


Raúl Cerezo: Pese a que haya aciertos aislados, el cine de acción moderno es un género que da sobre todo bodrios y poco título rescatable. Schwarzenegger se dio cuenta a tiempo y se calzó unos truños importantes, pero al menos tuvo el apoyo popular con sus comedias,  mientras Stallone se hundía en el fango con la boca torcida y llamando a Adrian. Sin embargo, es curioso, porque todo el mundo critica estos títulos pero ahora todos se mueren por “Los mercenarios 2”, tras apoyar la primera (que en este blog también nos parece muy ñordo y creemos que en manos de Tarantino hubiera sido una obra maestra). Entonces, ¿no hay mucha hipocresía? ¿Crees que se critican estas películas por pose y luego se están deseando ver? ¿Qué piensa de la resurrección de Stallone tirando de los personajes o de las situaciones que le funcionaron hace siglos? ¿Schwarzenegger no está intentando resucitar precisamente gracias a Stallone y ahora es Sylvester el que ha sabido "reinventarse", consiguiendo "empatar" con el armario?

DA: El mundo de por sí es hipócrita. Vivimos en una sociedad en la que la apariencia es todo, pero sinceramente, esa apariencia yo me la paso por el forro, si algo me gusta lo reconozco. Por ejemplo, y lo digo bien claro, ME ENCANTA LOS MERCENARIOS, es de las películas más divertidas que he visto en años, disfruté como un niño pequeño cuando la vi.

Mire usted, cuando estudié en la escuela de cine, la mayoría de mis compañeros se echaron las manos a la cabeza porque dije que me encantaba Rocky. Hay gente un poco cateta, porque no pueden concebir que tu abanico de gustos cinéfilos sea amplio. Me encanta Stallone, Van Damme y Schwarzenegger, pero también adoro a Billy Wilder, John Ford, Sergio Leone, Truffaut, Coppola, Scorsese, Spielberg, De Palma… ¿Hay algún libro donde diga que ver películas de todos estos señores sea incompatible?  Pero claro, en una reunión de cinéfilos gafapastosos, no puedes decir que acabas de pillarte el pack en Bluray de Rambo, porque eso “no mola”. Pues al carajo lo que “no mola”, yo dedico mi tiempo y dinero a lo que me gusta, y si me apetece ver la saga Rambo del tirón la veo. Lo mejor de todo esto, es que al final, con muchos de estos expertos del  7º Arte, termino dándoles una lección de cine, porque ellos solo han visto un determinado tipo de películas,  y yo, procuro ver de todo.

Respecto a sus otras cuestiones, creo que va a ser lo único en lo que estemos de acuerdo. Stallone es muy listo, y ha sabido salir del agujero más profundo y putrefacto en el que un artista puede estar. Y como bien dices, lo ha hecho haciendo lo mismo que llevaba haciendo toda su vida.  Además, en este periplo, ha adelantado al Gobernator, de hecho, si Arnold ha vuelto ha sido gracias a su amigo Sylvester, que no solo le ha dado un par de papelitos en Los Mercenarios, sino que ya han rodado otro film juntos, “The Tomb”, un thriller de ciencia ficción que promete ser espectacular.

Alejandro Pérez: -La resaca del éxito del primer "Rocky" propicio dar luz verde a "Toro Salvaje" porque la productora quería otra de boxeo ¿Impensable hoy en día o han cambiado poco las cosas desde entonces? ¿Sabe que existe un proyecto que intenta meter a Stallone y De Niro en un ring?

DA: Hoy día, si algo tiene éxito, los estudios se vuelven locos por repetir ese éxito una y otra vez. Si funciona Harry Potter, pues ya tenemos mil películas destinadas a niños con mundos mágicos y demás. Que ahora se pone de moda hacer pelis sobre Marte, pues tenemos tropecientas. Es un poco coñazo, la verdad.

Respecto a ese posible proyecto entre Stallone y De Niro, me da un poco de miedo. Además, por lo que tengo entendido pretende ser una comedia, por lo que más miedo me da. Stallone, cuando se auto homenajea puede llegar a ser muy divertido, pero en el terreno cómico, sus incursiones se han saldado con dos de sus peores películas.

Pedro Pérez: Ahora con internet es posible acceder a mucha alternativa al cine de acción americano ¿Hubiese sido diferente la vida de estos tres de haber existido una distribución mayor de los Woo, o los antes mencionados Hark y Lam durante los 80?

DA: Me resulta imposible responder a esta pregunta. El cine de acción de los ´80 es lo que es por el momento en el que se realizó. Tenían los medios que tenían y el mundo era el que era. ¿Qué hubiera pasado si hubieran existidos otros adelantos? Pues que posiblemente no hubiera escrito este libro o de haberlo hecho, no tendría nada que ver.

Raúl Cerezo: ¿Qué espera de Schwarzenegger y Stallone en un futuro? ¿Y del género? ¿Rocky y Rambo han muerto definitivamente o Stallone va a hacer real el chiste de Aterriza como puedas 2?

DA: Espero que sigan haciendo películas de calidad, y que sepan retirarse en la cima. Rocky para mí estás más que finiquitada con su excelente sexta parte. Pero con Rambo la cosa cambia, un John Rambo crepuscular creo que sería el capítulo final perfecto para el cine de acción tal y como lo conocimos hace casi 30 años.

Del género, una vez desaparezcan nuestros héroes predilectos, no le auguro nada bueno. Saldrán casos aislados de buenas pelis de acción, puede que aun encontremos algún actor con carisma, pero por lo demás me temo que solo veremos a chavalitos de 20 años correr delante de una pantalla verde.

Alejandro Pérez: - ¿Jason Stathan, con su acentazo londinense y su cráneo rasurado, es el relevo que estábamos esperando largo tiempo o un bluff total?

DA: Statham es el único que ha sabido entender de qué va todo esto. Pero por desgracia se encuentra muy solo para ser el relevo. Deberíamos encontrar 5 o 6 como él para hablar de un relevo generacional válido. De hecho, en los últimos dos años, se le está empezando a encasillar demasiado, porque si antes había 10 guiones sobre la mesa, se repartían entre 10 actores de acción, ahora, de esos 10, al menos 7 van a parar a él.

El futuro del cine de acción español 
Pedro Pérez: Países como Francia parecen están empezando a crear su propio estilo de cine de acción. ¿Es viable un cine de acción español? ¿Qué nos hace falta? ¿Puedes darnos una exclusiva de tus próximos proyectos, que sabemos alguno va ligado a esto de una manera sorprendente?

DA: El cine francés es una alternativa validísima al cine de acción americano. Luc Besson ha hecho mucho bueno (y malo) por el cine de acción en el país vecino. De su propia factoría salió “Venganza”, sorprendiendo al mundo entero con un Liam Neeson en modo fostiador como nunca antes lo habíamos visto.

En España se han realizado varios intentos, pero casi siempre han salido mal. A lo mejor es que no se cree realmente en lo que se hace, pero por ejemplo, hace muy poco se ha estrenado “Grupo 7”, que contiene unas escenas de acción muy bien realizadas.

Referente a mis proyectos, sí, tengo una idea para realizar cine de acción mezclado con otro de mis géneros favoritos, la comedia. Pero para nada será una peli spoof ni un “Aterriza como puedas” del cine de acción, será algo que ligue ambos géneros de la mejor manera posible sin la necesidad de caer en lo ridículo o auto paródico. Veremos que depara el futuro, pero me encantaría ser un director de cine de acción en nuestro país.

Raúl Cerezo: ¿Qué puede contarnos de las secuencias eliminadas de Máximo Riesgo? ¿Es cierto eso de que hay una donde Stallone salta entre dos montañas y varias personas que la vieron dijeron que era el momento más fantasma de la historia del cine?

DA: Algo hay de cierto en ello, pero para eso están los test screening, y por fortuna nos libramos de escenas de “dibujos animados” en esta trepidante película de Renny Harlin

El zoom erótico: Gracias, maese. Despídanos con su frase de acción favorita...

Diego Arjona: Pues que os voy a dar tantos derechazos, que me suplicareis que os pegue con la izquierda.
Volveré... (esperamos)


12 junio, 2012

JORGE FONTE Y LA ÚLTIMA ZEMECKISADA (o la primera)



Sí, fieles. Jorge Fonte, el célebre crítico, escritor y pensador de cine que ya entrevistamos en tres ocasiones (Uno, Dos y Tres) y que ha escrito, entre otros libros, uno de los mejores que existen en habla hispana sobre el maestro Spielberg (por ese motivo le entrevistamos, como habéis podido comprobar), aborda por primera vez en nuestro país a Robert Zemeckis y toda su obra para la poderosa, veterana y clásica colección de Cátedra Signo e Imagen / Cineastas. Tiene bastante lógica la elección del director en sus manos, por supuesto, pero vamos a entrar en materia, porque hemos sido unos privilegiados y accedido al libro, gracias a dicha editorial, antes que nadie. Y eso ha producido esta inevitable y gozosa entrevista a tres manos. Esperamos que os guste y, sobre todo, que compréis el libro sí o sí. Si os defrauda, ya sabéis, Delorean y cambio de acción. Pero no será así. No habrá camino de llamas. Estamos seguros.

Raúl Cerezo: ¿Quién es Jorge Fonte ahora mismo? ¿El mismo que dejamos en aquellas tres entrevistas o es otro humano diferente? ¿En qué proyectos te has visto envuelto desde entonces? Preséntanos tu Doc actual.

Jorge Fonte: Entre el libro de Spielberg y éste de Robert Zemeckis han pasado cuatro años. Así que, para empezar, soy un poco más viejo y más canoso. No, en serio. El libro de Zemeckis nació como una continuación lógica (y natural) del de Spielberg, ya que todos estaremos de acuerdo en que se trata de su principal y más importante discípulo. De hecho, en un principio había pensado incluir en ese libro un capítulo dedicado a su influencia en otros cineastas, pero finalmente por problemas de espacio decidimos no incluirlo, lo cual me dio pie a desarrollar más esa idea y centrarme en uno sólo de ellos.

Pedro Pérez: Da la sensación que mientras Spielberg ha ganado el Olimpo en el gran público, a Zemeckis todavía le queda camino por recorrer (aunque no lo comparta) a pesar de tener obras enormemente populares ¿Que le falta a Zemeckis para llegar a ese Olimpo? ¿El estar "a la sombra" de Spielberg le perjudica? ¿Es merecido que se diga tanto eso de que Zemeckis es un mero títere clon de Steven?

JF: Bueno, aunque hay muchas y muy evidentes diferencias entre ambos, sí es verdad que (a grandes rasgos) Zemeckis hace un tipo de cine muy parecido (o vinculado) con el de su mentor. Además, ten en cuenta que sus seis primeras películas (salvo Tras el corazón verde) fueron producidas por Spielberg, lo cual supuso un enorme espaldarazo para su carrera. Además, el guión de 1941 (1979) también fue obra de Zemeckis, por lo que la influencia del "Rey Midas de Hollywood" sobre él fue enorme. De Spielberg, Zemeckis aprendió a entender el cine como el gran espectáculo del entretenimiento y a usar la tecnología en beneficio del guión (y no al revés).

Alejandro Pérez: -¿Ha visto Tintin? ¿Cree que el motion capture perdurará como tecnología o tendrá una vida corta?

JF: Vaya, son muchas preguntas a la vez. Creo que Tintín no sólo es una gran película, sino una muy buena adaptación de los cómics de Hergé. Spielberg y Jackson acertaron en utilizar el sistema de la performance capture para realizar la mejor adaptación posible de las aventuras del periodista belga. Efectivamente, el maestro Spielberg supo cómo se debe utilizar esta nueva tecnología logrando un producto final mucho más impactante y redondo que lo que pudimos ver en las tres últimas películas de Zemeckis, que si bien tecnológicamente puede que sean muy innovadoras y visualmente impresionantes... las tres carecen de un buen guión y, tras la sorpresa inicial, la verdad es que a la media hora ya estamos un poco aburridos de tanta montaña rusa.


Raúl Cerezo: ¿Qué tal ha sido la propuesta y el trato con Cátedra? Aquí también amamos esos libros, pero creemos que a veces la estructura es muy similar. ¿Te imponen una estructura o te dejan volar libre? ¿Todo ha funcionado como en tu trabajo anterior con ellos, la también referencia ineludible sobre Woody Allen o de Oliver Stone?

JF: Como bien dices en la introducción a esta entrevista, Cátedra es -sin duda- una de las mejores editoriales de este país, y su colección Signo e Imagen una de las más prestigiosas, así que para mi es un verdadero honor contar ya con tres títulos con ellos (Woody Allen, Oliver Stone y Robert Zemeckis). Lógicamente, cuando escribes un libro para una editorial en concreto te tienes que someter al estilo propio de ellos. Piensa que es una colección de libros de bolsillo con un formato y unas características muy concretas y ya definidas después de tanto años. Llevan casi 90 títulos, es lógico que la estructura de muchos de ellos se repita, pero ahí es donde entra el trabajo del escritor para hacer los textos algo diferentes. De hecho, en mi caso, yo siempre he tenido total libertad para -siempre dentro de la estructura natural y física de la colección- plantearme el texto como mejor he creído. En resumen: ¡son muy buenos chicos!

Pedro Pérez:  Aunque sea una pregunta que te hayan hecho miles de veces.... ¿Por qué Zemeckis? O puesto de otra manera: ¿Que tiene para ti Zemeckis como cineasta por encima de tantos otros para merecerse el libro?

JF: Para empezar, que no existía ningún estudio serio en España sobre su obra, y ya iba siendo hora. A fin de cuentas, cuanta con varias películas claves en la historia del cine, como ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, Contact o Forrest Gump. Además, Regreso al futuro es una de las trilogías más importantes de nuestra generación. Creo que eso son motivos suficientes que justifican un libro sobre este director.

Alejandro Pérez: ¿No cree el guión de relojería de "Regreso al futuro" es una especie de milagro en el campo de los blockbusters?

JF: Es un error muy común creer que un superéxito de taquilla no pueda tener un buen guión detrás. No todas las obras maestras del séptimo arte tienen que ser en blanco y negro, con subtítulos y filmadas antes de los años 70. No. El cine comercial también tiene sus grandes obras... y desde luego la trilogía de Regreso al futuro lo es.

Raúl Cerezo: ¿Cuánto tiempo te ha llevado escribir el libro y desde cuando eres fan de Zemeckis? 

JF: Este libro se escribió muy rápido (año y medio aproximadamente). Se puede decir que casi se escribió solo. Tenía muy buena documentación y las películas fueron fáciles de conseguir (salvo Locos por ellos, que nunca se ha editado en España). El cine de Zemeckis no es complicado, y normalmente sus películas tocan temas de gran interés, lo cual te permite explayarte ampliamente. Fue muy divertido trabajar en este libro, poder hablar (aunque sea un poco), de los viajes en el tiempo, de la vida extraterrestre, de la soledad de un hombre en una isla desierta....

Pedro Pérez: - Tanto "Lo que la verdad esconde" como "Beowulf" me parecen películas fabulosas a nivel narrativo y técnico y aún así no parecen acabar de funcionar con el público. ¿Porqué es la taquilla tan injusta con Zemeckis? 

JF: La taquilla muchas veces es injusta con grande obras. Desgraciadamente, estos dos títulos que has nombrado (a mi entender) no lo son. Lo que la verdad esconde es tan sumamente hitchcockniana que seguramente sobrepasaría al propio Alfred Hithcock. Es un buen intento, pero se queda a años luz de propuestas mucho más interesantes y elaboradas como Náufragos o Contact. Lamento no coincidir contigo.


Alejandro Pérez: -¿Qué opina de los persistentes rumores de una secuela de Roger Rabbit ¿No sería un anacronismo resucitar esos personajes bajo el reinado de la animación por ordenador?

JF: Es muy difícil que a estas alturas se llegue a realizar una segunda parte de una película tan importante y fundamental para la historia del cine de animación como fue ¿Quién engañó a Roger Rabbit? Además, tienes razón, seguramente hoy la harían en animación digital cuando uno de los mayores logros de este film fue que, pese a todas sus innovaciones tecnológicas, se realizó a mano, dibujando fotograma a fotograma. Salvo Pixar, no creo que ningún otro estudio fuera capaz de realizar algo digno. Sinceramente, espero que a ningún productor loco se le ocurra poner en marcha un proyecto así. Hay películas que no necesitan segundas partes. son perfectas tal y como están.

Raúl Cerezo: ¿No crees que la carrera de Zemeckis es demasiado irregular, algo eliminada por Spielberg (involuntariamente) y, sobre todo, demasiado estancada y declive desde hace tiempo?

JF: Sí, sus tres últimas películas son más que olvidables. Realmente su último gran film fue Náufrago (allá por el año 2000). Pero ya ha terminado de rodar su nueva película Flight (que se estrenará estas navidades), y todo apunta a que volvemos a sus mejores momentos.

Pedro Pérez: - ¿Que esperas de Zemeckis en un futuro? ¿Que camino te gustaría que siguiese?

JF: Pues básicamente lo que acabo de comentar: que se deje de alta tecnología digital y vuelva a sus mejores años, con todas esas producciones que realizó durante la segunda mitad de los años 90, es decir, películas, historias en la línea de Forrest Gump. Contact y Náufrago.

Alejandro Pérez: -Los primeros films de Zemeckis, comedias negras, resultaron fiascos ¿no cree que bajo la tutela de Amblin perdió algo de esa mala leche aunque no dejara de ser él mismo?

JF: No necesariamente. La muerte os sienta tan bien es una magnífica comedia con muy mala leche. Y por aquel entonces, ya se había divorciado artísticamente de Spielberg y todo su entorno.

Raúl Cerezo: El libro nos ha parecido fabuloso y creemos que te sienta muy bien esta estructura de anécdotas y previos para luego pasar a desmenuzar film a film, como has hecho en prácticamente todos tus trabajos anteriores. ¿Qué proyectos tienes? Preséntanos a tu Doc del futuro.

JF: Bueno... les va a sorprender pero ahora en septiembre sale un nuevo libro dedicado a... RUSS MEYER !!!!!   La verdad es que se sale un poco (mucho) de mi línea pero era un proyecto en el que llevaba mucho tiempo trabajando y cuando la Editorial JC se mostró interesada en publicarlo me lancé de lleno. A fin de cuentas hay que diversificarse ¿no? y el cine da para muchos temas distintos.


Pedro Pérez: Ignorando mercados, libros ya escritos y tal, ¿Sobre que director te hubiese gustado escribir? Entiendo que los elegidos hasta ahora es porque te han marcado, pero puesto de otra manera, ¿te has quedado con las ganas de escribir sobre alguien porque ya hay muchos libros sobre él?

JF: Sí, sí, claro. Un buen ejemplo sería Billy Wilder, y otro, John Ford... pero todavía hay muchos otros directores sobre los que en España no se han estudiado sus películas con suficiente rigor, y yo todavía soy joven y me queda cuerda para rato, así que tiempo al tiempo.

Alejandro Pérez: - En la edición de los oscars de Forrest Gump también estaban nominadas películas como Pulp Fiction, Cadena Perpetua o Quiz Show ¿no cree qué con el premio, predecible por otro lado, se perdió la oportunidad de abrir puertas en los oscars a otro tipo de cine?, (me refiero sobre todo a Tarantino).

JF: Tarantino ha demostrado que es uno de los directores más interesantes de los últimos años (algún día caerá un librito sobre él, lo prometo), pero en 1995 Pulp Fiction sólo era su segunda película. Se llevó el Oscar al mejor guión (lo cual aunque ciertamente se lo mereciera, ya era un gran premio para un guionista con sólo dos títulos en su haber). El Oscar al mejor director (o película) aunque se les da por un título en concreto muchas veces lleva implícito una referencia a toda una carrera. Aparte, la Academia de Hollywood tiene, como todos sabemos, una más que clara inclinación ideológica/política/económica, y muchos de los premios que dan están demasiado influenciados por ello.

Ha vuelto a ser un placer tenerte aquí, Sr Fonte. Esperemos que no tardes en volver o no tendremos otra que tirar de Delorean. Gracias de parte de todos.